Presentación

¡Hola! Soy Laura.

El año pasado cursé el bachillerato de Ciencias Sociales con dudas de a qué camino me dirigía. Durante los estudios, se convirtieron la filosofía y las matemáticas en mis asignaturas favoritas.

Soy una persona que desde pequeña piensa mucho. Me preocupo por entender todo aquello que me rodea, y a pesar de ser algo bueno, muchas veces me ha saturado a mí y a los que me rodean.

En mi etapa escolar, tuve altibajos por amistades conflictivas, lo que muchas veces me hacía dudar de si, yo suponía un problema, o si era demasiado inocente. De manera que me llenaba la cabeza de preguntas sin respuesta, o quizá sin respuesta para la edad que tenía.

No sé si es porque en un momento me ví reflejada, pero siempre me he preocupado por el bienestar de los demás. De ese niño al que le hacían el vacío o se metían con él sin motivo alguno. Al vivirlo desde mi propia experiencia y externas, me di cuenta de la poca atención que se invierte en cierto tipo de conductas infantiles que impiden la convivencia y que te marcan para toda la vida. Pude así presenciar cómo actuaban de forma pasiva los maestros y maestras.

Por lo tanto, las dos razones por las que he elegido esta carrera son: para poder ofrecer un ambiente diferente al que he estado acostumbrada, dándoles la atención que se merecen y solventando estas conductas. Y porque me fascina la inteligencia, incluso aún sin desarrollar, que puede llegar a tener un niño y que quizá, es la herramienta para hacer desaparecer el ambiente insano que se genera en las aulas.

En concreto he escogido el doble grado porque siempre me ha gustado ponerme a prueba; así que me encantaría por un lado ser maestra y por otro especialista en pedagogía con mi propia clínica pedagógica.

Finalmente, uno de mis principales intereses es la danza. Considero que es una muy buena herramienta para autoconocerse, y ha sido fundamental en mi desarrollo personal a lo largo de mi vida.